martes, 31 de marzo de 2015

Una obra colectiva.



Para esa a quien no puedo dejar de hablar.

Dice Lyonel Truillot en su novela El bello amor humano que la vida es una obra colectiva. Creo que se refiere a mi vida, pero también a la tuya y a eso que muchos llamamos vida, así como concepto, sin que entremos en detalle sobre su definición.


A veces uno tiene estados de conciencia sobre eso que dice el autor, y para soportar los efectos de tal acción colectiva sobre la vida propia, al viviente (o vividor, o vivido) no le cabe tomar otra actitud que la de aquel que mira con atención e ingenuidad. Y aceptar que el tiempo es un maestro que agarra la brocha y pinta; que otras veces se la deja a uno y mira para otro lado; y las más de las veces, sin que nadie lo note, ata unas manos a otras y permite que pintemos entre todos una obra naif de gruesos trazos de la que nunca llegaremos a comprender cómo ni por qué llegó a realizarse.